Todos tenemos un salero en la cocina para dar vida a nuestros alimentos sin vida, pero ¿cuantos tipos de sal utilizáis? sal fina, la de toda la vida. Pero bueno cuando preparo pescados o mariscos a la plancha utilizo sal gorda. Supongo que esta es la respuesta que obtendría de la mayoría pero se que otros tantos que leáis estas líneas ya conocéis las sales de las que os voy a hablar.
Hace ya años que una sal inglesa ocupa un lugar al lado de las especias y esa Sal Maldon. Algunos de vosotros ya la conocéis o la tenéis también en vuestras cocinas para una buena carne, para un pescado, nos sirve para dar ese último toque a una ensalada de tomates de verano.
Hace poco, una de mis visitas al rincón gourmet de El Corte Inglés quiso que una no menos conocida y recolectada en una de nuestras islas del Mediterráneo, la Sal de Ibiza, también esté presente en nuestra cocina. Estos cristales llenos de vida también son conocidos como fleur de sal. Es una sal de cristales más pequeños que la Maldon y con más humedad. La textura y el sabor también son diferentes a la Maldon. Personalmente pienso que le da un toque muy especial a un desayuno tan simple como un pa amb tomaca o algo tan simple como una tostada con pan de pueblo con chocolate o crema de chocolate, probad a darle un toque de estos cristales de vida a cosas tan simples como un pa amb tomaca.
Todos conocéis la receta, solo deciros que cuando estoy en casa prefiero hacerlo al modo tradicional, después de tostar bien las rebanadas de pan, restregar el tomate, un chorrito de aceite de oliva virgen extra y ahora si, darle un toque de flor de sal, ah!! y no os paséis con un poquito es más que suficiente. Imprimir
No hay comentarios:
Publicar un comentario